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El Dogging o Cancaneo

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El Dogging o Cancaneo, una práctica sexual de exhibicionistas y mirones, muy de moda últimamente.

¿Qué es el Dogging?

Básicamente el Dogging (en inglés) o Cancaneo (en español) es la práctica sexual que se refiere a tener sexo en lugares públicos y contar con un público que puede ser un simple “mirón” o puede llegar a participar en el acto sexual.

En realidad no es una nueva práctica, ya que sus comienzos se remontan a los años 70 en el Reino Unido, y es una combinación de prácticas sexuales como son el exhibicionismo, el voyeurismo e, incluso, el intercambio de parejas.

En la mayoría de las ciudades hay lugares en los que habitualmente se lleva a cabo el dogging o cancaneo, que  suelen ser parques, playas, baños públicos, áreas de servicio o zonas urbanas.

¿Por qué se llama así?

El término “dogging” se hizo popular entre los británicos, ya que los “mirones” aprovechaban para ir a pasear al perro en zonas donde se sabía que iba la gente a prácticar sexo (aparcamientos, playas, etc.). Usaban a la mascota para disimular sus verdaderas intenciones.

Más tarde, entre los hispanohablantes, apareció la palabra ”cancaneo” y algunos argumentan que es debido a la traducción de “dog” al castellano, es decir, “can”.

Aunque también se dice que la palabra se hizo popular por la incomodidad de muchos de los lugares en los que se practica el dogging o cancaneo, que obliga a los participantes a adoptar la postura del perrito.

El término dogging se refiere a la práctica sexual entre heterosexuales, mientras que si los participantes son homosexuales, entonces se denomina“cruising”.

Normalmente en la mayoría de casos, este tipo de encuentros se pactan a través de Internet.

A través de la red se acuerda el tipo de práctica, el lugar y la hora en la que se llevará a cabo el encuentro sexual.

Hay ciudades como Madrid, con lugares de encuentro muy populares, como el paseo del Prado, el Parque del Retiro o el aparcamiento del Templo de Debod.

Los amantes del dogging suelen llevar a cabo sus fantasías sexuales en esos lugares.

En la red existen páginas especializadas y los aficionados al cancaneo suelen conocerse ahí para llevar a cabo la “quedada”.

¿Puede considerarse el “dogging” un trastorno sexual?

El dogging no deja de ser un tipo de parafilia como otra cualquiera.

Existen muchos tipos de parafilias, trastornos sexuales que hacen referencia a la excitación sexual como respuesta a objetos concretos o situaciones específicas.

Podríamos hablar de problema cuando la persona tuviera dificultad para excitarse si no se dan esas condiciones especiales.

Por eso, para la mayoría de expertos, el dogging no tiene relevancia desde el punto de vista clínico, ya que se considera una fantasía sexual de la persona que lo practica.

Dentro de las parafilias, el dogging podría ser considerado voyeurismo por parte de la persona que mira, y exhibicionismo por parte de la persona que se exhibe sexualmente.

Además,hay que tener en cuenta, que tanto las personas que practican el sexo, como los mirones que se deleitan observándoles, han llegado a un previo acuerdo, por lo que ninguna de las partes supondrá una carga de malestar para la otra.

Un exhibicionista por ejemplo, disfrutaría al mostrar sus genitales a una persona que no se lo espera mientras está paseando.

Por el contrario, una persona que practica el voyerismo disfrutaría observando el sexo de unos desconocidos a escondidas.

No obstante el dogging no deja de ser una práctica que busca satisfacer el deseo de ser observado o de observar,mientras se practica sexo, ya sea en un lugar público al aire libre o en un local de intercambio.

Si todo es consentido, todo vale.

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